jueves, 11 de febrero de 2010

Fe, arrepentimiento y vida cristiana

'La fe y el arrepentimiento no son ritos de iniciación en el cristianismo, sino que son vías para relacionarse con Dios. El arrepentimiento y la fe no son actos hechos una vez para convertirse en cristiano, sino que son actitudes del corazón hacia nosotros y nuestro pecado. La fe no es simplemente la manera de ser salvos; es la conexión vital de la vida cristiana. (...) La vida cristiana no es simplemente vivir de acuerdo a un código, sino una vida de fe, compromiso y comunión con el Dios viviente' (Tedd Tripp, Cómo pastorear el corazón de su hijo. Miami: Editorial Eternidad)

sábado, 6 de febrero de 2010

La abrumadora sensación de gozo del ser

Siempre me había llamado la atención descubrir en los salmos expresiones de gozo exultante: alegrarse en Jehová, cantar, celebrar, glorificar, 'con júbilo'... pero no acababa de entender la experiencia de este gozo...
Me parece que estos días lo estoy experimentando: y es abrumadora también la sensación. 
El corazón está lleno de gozo y gratitud al Señor, y la expresión de estos sentimientos se hace imperantemente necesaria, rebosa: 'Glorificarte he, oh Jehová; porque me has ensalzado, y no hiciste a mis enemigos alegrarse de mí' (Salmo 30:1) 'Por tanto a ti cantaré, gloria mía, y no estaré callado. Jehová Dios mío, te alabaré para siempre' (vs. 12)
Pero... ¿el gozo y la gratitud sólo dependen de mis circunstancias?: 'Dad a Jehová, oh hijos de los fuertes, dad a Jehová la gloria y la fortaleza. Dad a Jehová la gloria debida a su nombre: humillaos a Jehová en el glorioso santuario' (Salmo 29: 1-2)
El gozo del que había oído hablar me parecía vacío, de cartón piedra: los cristianos no estamos siempre sonriendo, y, si lo hacemos, nos mentimos a nosotros mismos y a los demás, porque el gozo no está sólo en la sonrisa, igual que la tristeza no está únicamente en el llanto. Pero los salmistas no hablan de sonreir, sino de alegría del corazón, no por nosotros, ni por nuestras circunstancias, que son cambiantes, sino por Él: 'Por tanto en él se alegrará nuestro corazón, porque en su santo nombre hemos confiado' (Salmo 33:21)
Me gustaría que la gratitud se instalara en mi corazón, y desde lo más profundo, cuando vengan los momentos difíciles o tristes, rebose y me haga recontar todos los beneficios que Dios ha traído a mi vida y glorificarle. Que nunca, aún en medio del llanto, me olvide de la bondad de Jehová para conmigo.

'Alegraos en Jehová, y gozaos, justos: y cantad todos vosotros los rectos de corazón' 
(Salmo 32:11)

febe*