miércoles, 27 de febrero de 2008

Jehová está conmigo como poderoso gigante


Jeremías tenía unos 23 años cuando Dios le anunció que lo había escogido desde antes de nacer para ser profeta a las naciones. Jeremías replicó: '¡Ah! ¡Ah! ¡Señor Jehová! He aquí, no sé hablar, porque soy niño'
Intentad poneros en su lugar... ¡ser profeta en ese tiempo! Seguro que sabía lo que implicaba (aunque fuera en parte), y se sintió inseguro de si mismo. Evidentemente, Jeremías solo no podía hacerlo.
Dios le responde: 'No digas, soy niño; porque a todo lo que te enviaré irás tú, y dirás todo lo que te mandaré'
No le deja lugar para las excusas, pero le da motivos más que suficientes para cumplir su voluntad: 'No temas delante de ellos, porque contigo soy para librarte, dice Jehová'
Jeremías tenía miedo, pero le dijo al Señor 'soy niño'... cuantas veces por temor buscamos excusas para no hacer las cosas, tratamos de encontrar motivos que nos justifiquen y no revelen la realidad de nuestro corazón... Con el Señor, sin embargo, las excusas no valen, porque cuando nos encarga algo, nos capacita para llevarlo a cabo y, además, nos promete su presencia y ayuda. Trata con nosotros de forma tan personal que nos da las palabras que necesitamos en lo más profundo de nuestro ser: él conoce lo que nosotros mismos tratamos de esconder.
Desde ese momento, el Señor le repetirá a Jeremías muchas veces que está con él. Y Jeremías, lo creerá, y lo aplicará a su vida. En el capítulo 20, en el que el profeta sufre por causa de su ministerio ('Alucinásteme, oh Jehová, y hállome frustrado'), dice: 'Mas Jehová está conmigo como poderoso gigante' (Jer. 20:11)
***
Nuestro Dios trata con nosotros con paciencia y misericordia, con pericia. Y, aunque tardemos, llegará un día que comprenderemos de forma práctica lo que nos ha querido enseñar.

febe*

martes, 26 de febrero de 2008

FIEL VIVIENDO CON EL ENEMIGO

"Y Acab llamó a Abdías su mayordomo. Abdías era en gran manera temeroso de Jehová" 1º Reyes 18:3

Este Abdías era el mayordomo del rey Acab... y qué decir en cuanto a la piedad del rey Acab y su esposa Jezabel (piadosos de Baal pero no de Jehová).

Me sorprende este hombre fiel aun siendo siervo del enemigo. Protegió a 100 profetas de Dios de la mano del rey, los escondió en cuevas y les alimentó salvando así su vida, de mano de su amo, del rey Acab, y jugándose la propia.

Y ahora en 1º Reyes Elías se encuentra con él y le pide que vaya a decirle al rey que quiere verle. Abdías está seguro que si lleva ese recado al rey, Acab lo matará. Así que expone al profeta las razones por las que cree que es "mala" idea. Entre ellas, le recuerda que él es temeroso de Dios. Le ha servido aun a costa de su propio cuello. No nos olvidemos la biblia no dice que Abdías era temeroso de Dios, no, era EN GRAN MANERA temeroso de Dios.

Después del discurso y la defensa de Abdías para no ir a decirle a Acab que Elías quiere verle, Elías sólo dice: Vive Jehová de los ejércitos, en cuya presencia estoy, que hoy me mostraré a él.
Y se acaba la discusión. El siguiente versículo dice:"Entonces Abdías fue a encontrarse con Acab, y le dio el aviso".

Abraham discutió con Dios acerca de Sodoma, Moisés argumetó que él no era capaz de llevar al pueblo, Gedeón pidió pruebas milagrosas de que Dios haría lo que había dicho, Jeremías gritó ¡ay de mi que soy niño! Pero Abdías, que era en gran manera temeroso de Dios, no replica la voluntad de Dios, sino que la cumple y punto.

Vivimos en días en las que convivimos con el enemigo, nos movemos en el mundo, quizá en parte le servimos, 8 o 9 horas cada día acambio de un sueldo, pero podemos seguir siendo en gran manera temerosos de Dios, podemos seguir obedeciendo a lo Abdías, sin discutir con Dios.

Animo, que nuestro testimonio sea una relidad en medio del mundo hostil.

raquel

viernes, 22 de febrero de 2008

Dos hombres jóvenes

Jeremías fue llamado por Dios cuando tenía unos 23 años, más o menos la misma edad que el rey Josías, que comenzó a reinar con 8. Estos dos jóvenes fueron temerosos de Dios y valientes, en un tiempo en que las canas eran equivalentes a sabiduría, y los jóvenes debían guardarse de mostrar sus opiniones en público. Dios los usó a ambos. Jeremías, en su juventud, empezó a profetizar en contra de la maldad de Israel, a hablarles de parte de Dios para que se arrepintieran. Josías, al leer el libro de la ley que encontró Hilcías (el padre de Jeremías), 'rasgó sus vestidos' (2Reyes 22:11) y se interesó por la voluntad de Dios, y leyó delante de todo el pueblo el libro y empezó una reforma en Israel.
La diferencia entre ellos dos y los otros jóvenes era su corazón: dice 2Reyes 22:2 que Josías 'hizo lo recto en ojos de Jehová y anduvo en todo el camino de David su padre (no de Amón, su padre), sin apartarse a diestra ni a siniestra'. Jeremías 1:5 nos revela que Dios conoció, santificó y dió a Jeremías por profeta desde el vientre de su madre.
Ambos fueron voceros de Dios para su pueblo y las naciones, pero lo fueron escuchados. Sin embargo, ambos fueron agradables a Dios, y vivieron conforme a su conciencia.

Que el Señor nos dé fuerzas para ser como ellos: valientes, decididos, comprometidos con el Señor y su Palabra.

¡Ánimo!

febe*

jueves, 21 de febrero de 2008

Con todo... toda su vida

"Con todo, el corazón de Asa fue perfecto para con Jehová toda su vida"
1º Reyes 15:14
Asa era la tercera generación de reyes rebeldes y desobedientes a Jehová, de alguna manera (evidentemente no por herencia- la fe no se hereda-) él amaba a Dios, de forma activa. Hay una lista de cosas que hizo por amor a Jehová, entre ellas no permitir a su propia madre ser reina madre porque había hecho un ídolo a Asera. (se enfrentó a su propia familia por amor a Dios).
A pesar de todo, no quitó los lugares alto. Y ahí viene la frase que ha cautivado mi pensamiento hoy: "Con todo, el corazón de Asa fue perfecto para con Jehová toda su vida".
Nuestra vida no es perfecta, pecamos, cometemos errores, nos caemos, nos equivocamos.... Como todos los humanos que pisan esta tierra! Con todo, Dios nos ama. Con todo, Dios nos perdona. Con todo, Dios nos tiene misericordia. Con todo, yo quiero ser de corazón perfecto toda mi vida para Dios.
Animo!
raquel

miércoles, 20 de febrero de 2008

'en esto pensad'


'Cuando yo decía: mi pie resbala: tu misericorda, oh Jehová, me sustentaba. En la multitud de pensamientos dentro de mi, tus consolaciones alegraban mi alma' (Salmos 94:18-19)

Este versículo hace tiempo que me ronda por la cabeza. Desde que lo leí me quedé sorprendida con él: 'en la multitud de mis pensamientos dentro de mi'... ¿al salmista le pasaba lo mismo que a mí? En momentos de debilidad, de duda, de miedo... los pensamientos borbotean dentro de mi cabeza, y llega un momento que son para mí incontrolables. Más de una vez he tenido que clamar a Dios en medio del tumulto de mi mente para suplicarle que tenga misericorda de mí y que los frene...
El salmista dice 'en la multitud de mis pensamientos dentro de mí, tus consolaciones alegraban mi alma'. Podemos hallar la calma en la tormenta de nuestra mente en las consolaciones de Dios, y, además, recibir alegría.

Con esto en mente, releí este pasaje en filipenses (por supuesto, sigo allí):

'Por nada estéis afanosos; sino sean notorias vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con hacimiento de gracias. Y la paz de Dios, que sobrepuja todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros entendimientos en Cristo Jesús. Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si alguna alabanza, en esto pensad' (Filipenses 4:8)

Cuando los pensamientos te abruman: preséntalos delante de Dios, y deja que su paz guarde tu corazón y entendimiento. Estas son sus consolaciones.
Para evitar ser abrumado por el torbellino de la mente, piensa en lo que es verdadero, honesto, justo, puro, amable, de buen nombre, lo que tenga virtud y alabanza. ¡Esto es medicina preventiva para nuestra mente!

... estoy en ello...

febe*

martes, 19 de febrero de 2008

...¿político o cristiano?....

"Sacrificó, pues, sobre el altar que él había hecho en Bet-el, a los quince días del mes octavo, el mes que él había inventado de su propio corazón" 1ª Reyes 12:33.

Si algo no se puede decir de Jeroboam es que fuera un mal político-estratega. Después de separarse el reino, él sabía perfectamente que si el pueblo iba cada año a adorar a Jerusalén, al final se reunificaría, a él lo matarían y se acabaría su aventura de rey. Así que hábilmente proveyó al pueblo la religión que necesitaba lejos de la capital de Judá (quien evita la ocasión evita el peligro) y se inventó dos nuevos lugares donde adorar Bet-el y Dan.

No contento con eso, se inventó sus sacerdotes, su forma de adorar, su altar y hasta la fecha... claro... puestos a darle a la imaginación.

Una de las definiciones para inventar es "fingir hechos falsos"...

¿Dónde voy a parar? A Jeroboam su invención le cuadraba para sus fines políticos. ¿Me estoy inventando algo yo que me cuadre en mi esquema, que no moleste mi conciencia? No esteré obedeciendo a Dios, que es lo que hizo Jeroboam "Y esto fue causa de pecado" (v.30) Pero cuadra, queda bien, parece espiritual..... PERO NO LO ES.

¡Que no vivamos para la galería sino para Dios, en verdad, de corazón sincero!

"no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas" 2ª Corintios 4:18

rachel

jueves, 14 de febrero de 2008

Solo una vez

Mira al sol nacer en lo alto y extender su luz,
mira las estrellas y la luna en su plenitud,
oye cómo gime el viento en su andar veloz,
siente cómo cae la lluvia canta su canción;
contempla el milagro de la creación reflejado en la humanidad
y piensa en tu vida y en tu condición como hombre entre lo demás,
y dime si es sabio vivir alejado de Dios sin más;
¿no es acaso cierto que todo es vanidad
y que alguien nos ama con suma intensidad?
Si es verdad que Él vive ¿por qué no intentar
buscarle y seguirle sin dudar?

Si es cierto que existe Dios será importante encontrarle...
que solo se vive una vez, una vez...

Mira cómo pasa el tiempo, rueda sin parar,
del verano al frío invierno y vuelve la Navidad,
te contemplas a ti mismo otro año más,
días que han pasado y que nunca volverán;
escucha la voz de tu propia conciencia que suele traerte luz,
y acuérdate de tu Creador en los días de fuerza y de juventud,
y traza tu senda con un nuevo rumbo desde la cruz;
¿Quién podrá entenderte mejor que tu Creador?
¿Quién podrá llenarte mejor que el mismo Dios?
¿De qué te sirve tanto placer y tanto afán
si una deuda amarga es tu final?

¿Por qué no amar más a Jesús
que dio Su vida por ti en la cruz?
Que solo se vive una vez, una vez...

Cuando acabe tu camino y mires atrás,
cuida de que puedas alegrarte de verdad,
que tu rostro se ilumine de felicidad
y compruebes que has vivido anclado en la verdad;
que no ha sido en vano tu tiempo en la tierra
porque has caminado en la luz,
porque hubo un momento tranquilo en tu vida
cuando aceptaste a Jesús, podrás entender que fue mucho mejor
amar la cruz; párate y acepta el perdón y la bondad
que Jesús te ofrece y que puedes alcanzar,
antes que te llegue el momento de partir
y al final te tengas que arrepentir y llores, en soledad,
por no haber hallado el camino...
que solo se vive una vez, una vez.

M. Vidal


miércoles, 13 de febrero de 2008

'a tu prójimo como a ti mismo'

"La llave para entender el precepto de 'amar al prójimo como a ti mismo', dice Lewis, es comprender la frase 'como a ti mismo', ¿cómo nos amamos a nosotros mismos? Nos amamos a nosotros mismos, dice, queriendo lo mejor para nosotros y actuando consecuentemente, incluso cuando no nos gustamos a nosotros mismos. Todo lo que hacemos, desde que nos levantamos por la mañana, hasta que nos acostamos por la noche, comer, hacer ejercicio, bañarnos, trabajar, todo lo hacemos porque queremos lo mejor para nosotros. Y utilizamos nuestra voluntad para llevar a cabo estas actividades, independientemente de si nos gusta hacerlas o no.
Escribe Lewis: 'no experimento lo que se dice un sentimiento de cariño o afecto por mí mismo, y ni siquiera disfruto siempre de mi propia compañía. Así que 'ama a tu prójimo' no significa 'tenle cariño' o 'encuéntralo atractivo'... Puedo contemplar algunas de las cosas que he hecho con rechazo y horror. De modo que en apariencia se me permite odiar o rechazar algunas de las cosas que hacen mis enemigos'. Entonces recuerda que sus maestros le decían que era importante 'odiar las malas acciones de un hombre, pero no... al hombre'. Siempre pensó que se trataba de una distinción tonta: '¿cómo se podía odiar lo que hacía un hombre y no odiar al hombre?'. Años después, se dio cuenta de que había una persona con la que había estado haciéndolo tuda su vida, a saber, él mismo".

Nicholi, Armand M. La cuestión de Dios. C. S. Lewis vs. S. Freud. Rialp. Madrid; 2004: p. 252-252

lunes, 11 de febrero de 2008

TODOS LOS DÍAS



"He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo" (Mateo 28:20b)

¡Qué palabras tan consoladoras! ¡Y tan reales!

Una promesa de Cristo a sus discípulos. Una promesa de Cristo para nosotros sus redimidos. Jesucristo está conmigo cada día, en cada momento, hasta que le pueda ver con mis propios ojos el día de Su Segunda Venida. y eso lo sé "de memoria", y por supuesto me lo creo, pero no está muy a menudo esta realidad en mi mente.

Hoy, ahora, Jesucristo está conmigo. Ascendió a los Cielos, ¿Y qué hace allí? ¿Cuál es su oficio? Es interceder. Cristo está conmigo intercediendo delante del Padre, presentando por Su Sangre mis oraciones, para que puedan ser aceptadas por el Padre, y respondidas, cuando sean oradas en su Voluntad.

Jesucristo está conmigo porque El quiere, no hay otra razón o explicación. ¿Acaso lo merezco? ¿Acaso soy tan justa y perfecta para que El quiera estar conmigo? Madre mía si tuviera que depender de eso... Jesucristo derramó Su Sangre en la Cruz del Calvario porque me ama. No lo hizo porque me amaba en un momento pasado solamente, lo hizo porque me ama también ahora. A pesar de los pesares, me ama.

Y en este día me he dado cuenta de cuán extensa es la misericordia de Dios, de cuántas cosas me ha librado: de una vida desgraciada, sujeta al pecado o a los mismos demonios, de una vida gobernada exclusivamentevpor mis propios pensamientos, o por mis propos sentimientos, o los de otro... me siento tan agradecida, y a la vez tan perpleja!

Tengo un Padre, que me ha hecho su hija por su pura gracia y bondad. Me sorprende, aún no lo entiendo, como la Trinidad se dio entera por mi redención. El Hijo entregándose, el Padre entregándole sin perdonarle "quién a su propio Hijo no perdonó", el Espíritu Santo viniendo a morar en mi espíritu. ¡Cuánto nos ama el Padre para no perdonar a Su Hijo perfecto en el moemnto de la Cruz! El pensamiento demoníaco es: "que padre mataría a su hijo", ni los demonios ni los humanos perdidos entienden de verdadero amor sacrificial, y aún a nosotros nos sorprende, mas fue así.

El acto de la Redención es en sí mismo la mayor muestra de amor sacrificial, amor hasta la propia muerte. Y de este amor es del que yo necesito aprender, y no pienso en dedicarme a vivir entregada al servicio de los desamparados (lo cual es muy honroso) sino en algo más difícil, más profundo y con mayores implicaciones para mi yo: sacrificarme delante de mi Padre, para servir a Cristo, en el Espíritu Santo. Un sacrificio de los pensamientos que aún son carnales, un sacrificio de la conducta que aún es egoista y busca su propio deleite, un sacrificio de mis miembros físicos, que aún buscan su propia comodidad. Ese es el sacrificio que yo deseo experimentar, el "de verdad", el de un corazón que suplica porque le sea mostrado su propio engaño y perversión, el sacrificio de perdonar y pedir perdón sin más, el sacrificio de amar a mi marido por lo menos tanto como me amo a mi misma (que la cosa ya cambiaría mucho, imaginemos si le amo más que a mi misma), ese el sacrificio que deseo aprender.

¿Os acordáis del salmo: "profiere mi corazón palabra buena"? así me siento ahora mismo, como una fuente que brota exclusivamente gratitud, solo gratitud por toda la obra de Dios, en todas sus facetas, en toda su perfección. Es una sensación como si hubiera un "canal" directo entre las entrañas, lo más profundo de mi ser, y mis labios, ahora mismo mis dedos, puesto que son los que os transiten mi pensamiento =)

Dios es bueno, da igual como nos levantemos mañana, si tristes o contentos, si alegres o enfadados, o dolidos, o cansados... nuestros ojos pueden mirar al cielo, y nuestro espíritu puede elevar una oración de gratitud al Padre, aunque sea "solo" por el hecho de poder llamar a Dios mi Padre.


Anna







miércoles, 6 de febrero de 2008

"Aquellos que no se dirigen a Dios en las pequeñas tribulaciones carecerán de hábito y de recursos para mitigar las grandes cuando se presenten, los que no han aprendido a pedirle cosas pueriles carecerán seguramente de toda disposición para pedirle cosas grandes. No debemos ser demasiado arrogantes. Supongo que en ocasiones somos disuadidos de hacer pequeños ruegos por un sentido de nuestra propia dignidad, más que por la dignidad de Dios"

C.S. Lewis. "Si Dios no escuchase. Cartas a Malcolm

martes, 5 de febrero de 2008

'para que seáis irreprensibles y sencillos'

'Haced todo sin murmuraciones y contiendas, para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin culpa en medio de la nación maligna y perversa, entre los cuales resplandecéis como luminares en el mundo; reteniendo la palabra de vida para que yo pueda gloriarme en el día de Cristo, que no he corrido en vano, ni trabajado en vano'. (filipenses 2:14)

Definiciones (basadas en las palabras originales, usando el Strong =):
'todo': cada una de las cosas.
'murmuración': un debate secreto, un descontento secreto que no se dice en público.
'contienda': pensamiento de uno pensando en sí mismo, cuestionar qué es la verdad.
'irreprensibles': sin censura, libre de falta o defecto.
'sencillos': inocente, simple, puro (sin mixtura, en un vino o en metales).
'sin culpa': que no pueden ser censurados.
'maligna': perversa, enferma.
'perversa': en contra de la voluntad de Dios.
'resplandecer': brillar, hacerse evidente.
'luminares': luz como la de las estrellas.
'reteniendo': guardar, aplicar, atender.

Fantástico: vuelvo a leerlo:
'Haced todo sin murmuraciones y contiendas, para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin culpa en medio de la nación maligna y perversa, entre los cuales resplandecéis como luminares en el mundo; reteniendo la palabra de vida para que yo pueda gloriarme en el día de Cristo, que no he corrido en vano, ni trabajado en vano'.

Unas frases tan cortitas y tan llenas de retos... Lo primero que he pensado ha sido, 'sí, claro: ¡sin culpa, irreprensible! -esto es lo más gordo, digamos-. Pero luego he pensado... 'sin murmuración, sin contienda'... y lo he dicho más flojito en mi mente. Evidentemente, no llegaré a ser irreprensible si no empiezo por lo más pequeño...

Pero, fijáos: dice 'haced ... para que seáis' (futuro), y luego 'entre los cuales resplandecéis como luminares en el mundo' (presente).
¡Uau! ¡Esto sólo puede ser obra de Dios! Nosotros, conscientes de nuestra flaqueza y pecaminosidad, nos esconderíamos hasta el día que fuéramos 'irreprensibles, sencillos y sin culpa' para resplandecer. Pero Dios, que es rico en misericordia, ya nos usa como luminares, aunque estemos en proceso de 'irreprensibilidad' (¿existe esta palabra?)

Al leerlo la primera vez he pensado: 'sí, venga, ¿y eso cómo se hace?'. Al pensarlo, le pido a Dios que me ayude a ser fiel en lo poco (murmuración, contienda, por ejemplo) para serlo también en lo mucho.

¡Que el Señor os bendiga!

febe*

lunes, 4 de febrero de 2008

...humildad...gratitud...misericordia...

"Y se le apareció Jehová a Salomón en Gabaón una noche en sueños, y le dijo Dios: Pide lo que quieras que yo te dé. Y Salomón dijo: Tú hiciste gran misericordia a tu siervo David mi padre, porque él anduvo delante de ti en verdad, en justicia, y con rectitud de corazón para contigo; y tú le has reservado esta tu gran misericordia, en que le diste hijo que se sentase en su trono, como sucede en este día. Ahora pues, Jehová Dios mío, tú me has puesto a mí tu siervo por rey en lugar de David mi padre; y yo soy joven, y no sé cómo entrar ni salir. 1ª Reyes 3:5-7.

Nuestra tendencia como jóvenes es justamente la contraria, yo se hacer y tú no, no me digas cómo tengo que hacer las cosas, tú no entiendes de qué va.... Sin embargo aquí Salomón reconoció ante Dios la pura realidad: ·"yo soy joven y no sé”.
Y la misericordia de Dios es grande, no podemos concluir otra cosa que: Dios es así!

“Y le dijo Dios: Porque has demandado esto, y no pediste para ti muchos días, ni pediste para ti riquezas, ni pediste la vida de tus enemigos, sino que demandaste para ti inteligencia para oír juicio, he aquí lo he hecho conforme a tus palabras; he aquí que te he dado corazón sabio y entendido, tanto que no ha habido antes de ti otro como tú, ni después de ti se levantará otro como tú. Y aun también te he dado las cosas que no pediste, riquezas y gloria, de tal manera que entre los reyes ninguno haya como tú en todos tus días” v. 11-13.


Y me vuelve a la mente el versículo que lleva semanas rebotándome en el cráneo (a ver si al final se me queda) “todo el que pierda su vida por causa de mi la hallará”.


“Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia y todas estas cosas os serán añadidas”


Y en este caso fuera literalmente añadidas, a veces pensamos que buscando a Dios, las demás cosas perderán su importancia a nuestros ojos... y bien cabe esa interpretación, buscar a Dios hace que nuestras prioridades se reordenen, pero Dios es tan misericordioso que incluso nos da aquello que no pedimos, nos añade lo que decidimos quitar por amor a Él, porque Él nos ama.


raquel

'Ocupaos en vuestra salvación'

¿Qué quiere decir exactamente esto? Tenía una vaga idea de lo que podía significar, ahora tengo una vaga idea más grande que antes... es de esas palabras en las Escritura que me parece que se van comprendiendo a medida que ese van practicando... y lo digo consciente de que tendré que empezar a investigarla en mi vida...

'12 Por tanto, amados míos, como siempre habéis obedecido, no como en mi presencia solamente, sino mucho más ahora en mi ausencia, ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor; 13 Porque Dios es el que en vosotros obra así el querer como el hacer, por su buena voluntad'. (Filipenses 2)

Son pocos versículos pero densos...
La palabra 'ocupaos' implica un trabajo constante. Debemos cuidar nuestra salvación (liberación, seguridad, preservación), vivir una vida salvada, no volver a los pensamientos y acciones que teníamos cuando estábamos en nuestros delitos y pecados, no vivir en esclavitud, inseguridad y miedo a la perdición. Eso sí, con temor y temblor, conscientes de que es por la obra de Dios que podemos vivir de esta manera, que nosotros, por nosotros mismos no podríamos haber cumplido ninguno de los requerimientos para ser justificados por nuestras obras.
Pero, ¡gloria a Dios!, Él no nos dice que nos ocupemos de nuestra salvación porque sino la perderemos, sino que estemos ocupados en ella, y Él obrará en nosotros 'el querer y el hacer'.
Dios transforma nuestras vidas, Dios obra en nuestro corazón, él destruye las cadenas que nos atan a la carne... pero debemos estar en el 'tajo' para que él obre en y con nosotros.

Necesito pensar más en ello... me quedo con la sensación de no acabar de entenderlo... ¿alguien me ayuda?

febe*

viernes, 1 de febrero de 2008

I'm significant?

¡soy importante! - gritó la mota de polvo

Me encanta esta tira de Calvin.

Muchas veces me veo igual que él, gritando en mi interior al universo entero: ¡soy importante! ¡el mundo me necesita!... pero... en realidad, no soy más que una mota de polvo en el infinito. Mi voz se pierde, y no llega a ningún lado...

¿A ningún lado? Dios, que es el MÁS grande, el INFINITO, el que realmente es IMPORTANTE y RELEVANTE en el mundo, nos dice: 'Porque a mis ojos fuiste de grande estima, fuiste honorable, y yo te amé' (Isaías 43:5) y 'No temas, que yo soy contigo, no desmayes, que yo soy tu Dios que te esfuerzo: siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi justicia' (Isaías 41:10).

Es como si el universo entero nos dijera, en respuesta: sí, eres una mota de polvo, pero para Dios, eres importante.

¡Que el Señor os bendiga!


febe*