viernes, 4 de septiembre de 2009

¡Ufff! La justicia...

Es difícil sobrellevar una vida 'como Dios manda' (es decir, tratando de seguir sus pisadas y crecer en el carácter de Cristo) y ver como, aparentemente, la justicia pasa de largo.
Sé que no soy la única que se lo ha planteado, ¡cuántos salmos hay que hablan sobre el tema! ¡Cuántas veces los creyentes hemos pedido al Señor 'ver su justicia en la tierra de los vivientes'!
Hay días en que sobrellevar tal peso cuesta más que otros... pero es entonces, aunque no queramos, que debemos echar nuestra carga sobre Dios y descansar en Él... aunque nos cueste horrores... aunque tenga ganas de reclamarle a Dios que haga lo que yo quiero, o lo que yo considero justo...
¡Ufff! ¡Cuánto cuesta! ¡Cómo pesa mi carnalidad! Gracias al Señor por su palabra, que ejerce de freno sobre ella...
'Calla a Jehová, y espera en Él: no te alteres con motivo del que prospera en su camino, por el hombre que hace maldades. Déjate de la ira, y depón el enojo: no te excites en manera alguna a hacer lo malo' (Salmo 37: 7-8)

Sé que cuesta, a mí me está costando, pero ánimo hermanos, no perdamos el rumbo...

febe*

3 comentarios:

GUSMAR SOSA dijo...

intentamos febe!!!!!! TRatamos!!!!! buena reflexion, espero no perder el rumbo!

Anwa Túre dijo...

Es interesante pensar que justicia y misericordia de Dios van siempre dela mano.

La justicia de Dios es en realidad misericordía y su misericordia existe porque es justicia que así sea.

Bendiciones, querida Febe.
Gracias por la bienvenida!

Dionisia De La Rosa dijo...

Buena reflexion,
No quiero perder el rumbo...
Saludos Febe.