'Con amor eterno te he amado; por tanto, te soporté con misericordia'
Jeremías 31:3
Jeremías 31:3
Hay días en que me siento mal, en los que pienso que Dios se hartará de mí porque siempre estoy con lo mismo... no soy fiel, no soy perseverante, no vivo tan cerca de Él cómo debiera, y cada cierto tiempo, casi cíclicamente, tengo que ir delante de su presencia, avergonzada, y pedirle que tenga misericordia de mí. Muchas veces, me cuesta acercarme a Él de nuevo porque pienso que se hartará de mí, que ya no me escuchará más, que, al verme piensa -como pensaría yo- 'ya está otra vez con lo mismo...'
Pero no, Dios no es así: su amor es eterno, perfecto, completo. Como nos amó al principio nos ama ahora, y Él sigue siendo fiel, a pesar de nuestra infidelidad.
Gracias, Señor, porque me soportas con misericordia
No hay comentarios:
Publicar un comentario