sábado, 1 de marzo de 2008

cisternas rotas...

El primer mensaje de Dios a su pueblo a través de Jeremías, deja el corazón encogido ante la actualidad de las palabras del Señor, que podría incluso aplicarse a nuestra vida. ¿Cuántos de los que hemos conocido caminando en los caminos del Señor continuan ahora? ¿Cuántos han renunciado a Cristo por el camino? ¿Cuántas veces, yo misma, he clamado al Señor '¿a dónde iré? tú tienes palabras de vida eterna' cuando me he planteado dejar de luchar la vida cristiana?

'Así dijo Jehová: ¿qué maldad hallaron en mí vuestros padres, que se alejaron de mí, y se fueron tras la vanidad y tornáronse vanos? (...) Por tanto entraré aún en juicio con vosotros, dijo Jehová, y con los hijos de vuestros hijos pleitearé. Porque pasad a las islas de Chittim y mirad, y enviad a Cedar, y considerad cuidadosamente, y ved si se ha hecho cosa semejante a ésta: si alguna gente ha mudado sus dioses, bien que ellos no son dioses. Pero mi pueblo ha trocado su gloria por lo que no aprovecha. Espantaos, cielos, sobre esto, y horrorizaos; desolaos en gran manera, dijo Jehová. Por que dos males ha hecho mi pueblo: dejáronme a mí, fuente de agua viva, por cavar para sí cisternas, cisternas rotas que no detienen aguas' (Jeremías 2:5, 9-13)

Son tres pasos: 1. Alejarse de Dios (fuente de agua viva), 2. Ir tras la vanidad (cavar para sí cisternas) 3. volverse vanos (conformarse con cisternas rotas que no detienen aguas)

Muchas veces, quizá sin alejarnos del todo de Dios, cavamos nuestras propias cisternas y nos conformamos con el agua de la lluvia que queda en ellas. Pudiendo tener agua viva, pura, elegimos 'nuestra propia agua', agua de cisterna, contaminada, nuestros recursos vanos... y corremos el peligro de volvernos vanos.

'Respondió Jesús y díjole: Cualquiera que bebiere de esta agua, volverá a tener sed; mas el que bebiere del agua que yo le daré, será en él una fuente de agua que salte para vida eterna' (Juan 4: 13-14)

Dios me da agua viva en mi interior... ¿para qué quiero cisternas? ¿es que el manantial dejará de brotar?

(continuará...)

febe*

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Marc predicaba ayer que podemos dejar de seguir al Señor sin necesidad de negarle, simplemente porque nos paramos. Y Jesús sigue caminando, y nosotros nos hemos quedado parados en mitad del camino, quizá aun no hemos dado media vuelta, pero la daremos sino seguimos al Señor de cerca.
raquel

Despiertas... dijo...

Por supuesto que pueden usar la imagen, =) yo no he pedido permiso, =) Veo que nos une Cristo =) Un abrazo, Nat